Nos reencontramos después de casi dos décadas. En aquel tiempo ella era una destacada conferencista y capacitadora de secretarias ejecutivas y yo quería ser una profesional en ese dinámico sector. La señora Rosario dirigía el Instituto Argentino Boliviano; yo egresé y opté por seguir la ruta del periodismo, ella continuó su loable labor: formando y asesorando jóvenes.
La volví a ver unos años después al frente del colegio Saint George, hice mi tesis en Comunicación Social en ese centro educativo y ella estaba siempre radiante, con esa personalidad arrolladora, impartiendo sus conocimientos, pero esta vez trabajaba con niños y adolescentes. Enfrentaba un nuevo reto con mucho entusiasmo. Años después decidiría seguir una carrera universitaria.
La profesional
La señora Rosario se formó como secretaria ejecutiva y comenzó a ejercer en 1969 y 15 años después con toda autoridad comenzó a impartir seminarios de capacitación para sus colegas, se capacitó y recibió invitaciones de todo el país así como del exterior. Esta labor la llevó a Perú, Paraguay, Uruguay, Chile y República Dominicana para impartir talleres motivacionales y de superación profesional.
En1989 estuvo al frente del Instituto Argentino Boliviano, un centro que en ese tiempo era el mejor referente en la formación de secretarias. Ahí permaneció por más de un lustro y luego pasó a otra institución educativa. “Hasta que decidí que me dedicaría por completo a impartir mis seminarios y talleres”, afirma. Pero no pudo, su destino era continuar en la educación, pero esta vez de los más chiquitos.
En 1995 cuando la convocaron del colegio Saint George para que se haga cargo de la Subdirección. Su carácter y espíritu de educadora fue tentado y así se convirtió en la primera empleada del colegio, como ella manifiesta. Este 25 de octubre cumplirá 18 años en esa institución.
“Son muchos años dedicada a los alumnos, los papás, mis colegas. No puedo dejarlos. Soy el nexo entre públicos internos y externos, el lazo entre padres, alumnos y docentes. Atiendo a los medios de comunicación y a la competencia”, dice.
Es por este motivo que decidió ingresar a la universidad NUR y formarse como relacionista pública, una meta que se trazó y consiguió hace tres años. Se graduó con la máxima nota. Por ello
es que con el mismo ímpetu continúa estudiando, está realizando una especialidad en resolución de conflictos. Es que ella dice que tiene mucho que ofrecer en su trabajo como profesional.
Nada detiene sus ansias de continuar capacitándose y transmitiendo sus conocimientos y experiencia en la labor diaria.
Nuestra cita fue en el décimo piso de un edificio de la ciudad de los anillos, donde funciona el bufete de su hija mayor, la abogada Carola Serrate Tarabillo. Ahí estaba la gran mamá con esa cabecita platinada y pulcra; en su derredor sus retoños pendientes de su look durante la sesión fotográfica. “Somos las tres mosqueteras y ella es D’ Artagnana, bromearon”.
No ha pasado el tiempo para esta valerosa, luchadora y amena dama, que representa perfectamente a la mujer cruceña en toda la extensión de la palabra. Nació un 22 de abril de 1948 en el hogar de Luis Tarabillo e Hilda Serrate y fue bautizada con el nombre de Victoria del Rosario.
La madre
Prefiere empezar hablando de su familia. “Ellas son mis hijas”, dice muy orgullosa de los logros de las tres bellas y exitosas profesionales. “Ahora también son mis madres”, añade. Desde que perdieron al papá, Don Sherman Serrate, están más unidas que nunca.
“Es que la vida nos ha puesto duras pruebas y hemos sabido salir adelante siempre unidas. Hace años fue la enfermedad de Hilda Rosario, hace tres años el final del pilar de la familia, mi esposo enfermó y nos abandonó; y el año pasado, un diagnóstico devastador sobre mi salud. Siempre juntas nos hemos fortalecido y con la fe en Dios superamos las pruebas”, cuenta con mucha calma al recordar los embates de los que ha salido victoriosa con el apoyo de sus tres ‘mosqueteras’. .
Sus 65 bien cumplidos años se proyectan a través de la lucha y los desafíos de la vida, su amor por su familia, conformada por sus tres hijas: Carola Constanza, Hilda Rosario y María Renée -su esposo partió al más allá hace tres años-, su profesión y la pasión por su trabajo.
La consejera
Para terminar nuestra amena charla quiso enviar mensajes a los niños: “La mejor herramienta que van a tener en su vida son los valores y a continuación la parte académica. Porque es muy importante ser una buena persona.
A los padres de familia, quiero hacer propias las palabras del sacerdote Marcial Chupinagua que dice, ‘no se cansen de compartir con sus hijos, no se cansen de enseñarles valores’.
Finalmente, a mis colegas que le pongan amor y pasión a todo lo que hacen, porque no es fácil ser un buen docente”
Venció al cáncer es una sobreviviente
EL DIAGNÓSTICO: “Me hacen la mamografía cada año en el mes de octubre durante las campañas. Pero el 2011 acudí a mi control de rutina y había una anormalidad. Luego de la biopsia, me dijeron que tenía cáncer”
LA SOLUCIÓN: En menos de un mes me sometí a una mastectomía, me extirparon el seno por completo y muchos ganglios de las axilas.
EL REMEDIO: Seguidamente vino la quimioterapia, perdí todo el cabello y luego fui superando y venciendo el mal, con el apoyo de mis hijas y mis amigos que nunca me abandonaron.
LA ENSEÑANZA: Es muy importante vencer los miedos. Hay que hacerse los controles anuales, si este mal es detectado a tiempo puede ser derrotado. Las mujeres somos fuertes y valientes ante las pruebas del Señor.
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