sábado, 9 de noviembre de 2013

Promos' reactivan movimiento en la Ballivián Bachilleres reducen gastos alquilando trajes gala

Ilusionada y entusiasmada, Lorena Salinas muestra a sus amigas y compañeras de colegio el vestido de gala que va a lucir la noche del desfile, en su fiesta de graduación. Se trata de un elegante vestido rojo diseñado en sedas que lleva diminutos bordados en pedrería.

"Comprarlo me hubiera costado un ojo de la cara; es más, ni siquiera lo hubiera lucido porque me habría costado el dinero que no tengo" dice un tanto sonriente en una de las tiendas de fantasía de la calle Ballivián.

Sastres del sector trabajan a full. A estas alturas del año este sitio se llena de mujeres, hombres y niños que llegan a buscar prendas de alquiler aunque en estas fechas no para danzar, sino para un momento importante de sus vidas, como el de la graduación, quince años o matrimonio.

De un tiempo a esta parte, la culminación de la etapa escolar se ha convertido en una alternativa para que los sastres de este sector de la ciudad incrementen sus ingresos económicos en mayor magnitud que otros meses del año. "Para esta fechas, hay el mismo o más trabajo que para carnaval porque la gente ya no quiere gastar para guardar la ropa, menos ahora que las jovencitas no quiere repetir las prendas", dice la señora Aida Daza, propietaria de la tienda de fantasías La Danza.

Ofertan precios económicos y diseños a la última moda. Según indica, los precios para los alquileres varían de acuerdo al gusto y la posibilidad económica del cliente, pues hay desde Bs 70 los más sencillos hasta los Bs 500 que son los trajes de alta costura que implican el uso de materiales más costosos como sedas o pedrería. "Hay muchos pedidos de jovencitas que traen su diseños propios, lo estrenan y al otro día lo entregan pagando lo que corresponde", dice mientras confirma al menos 10 alquileres por día los fines de semana.

"Se gana lo que se trabaja y los clientes son los más beneficiados porque se reducen costos hasta en 80% de lo que puede gastar una prenda nueva de este tipo", dice otra mujer que prefiere no dar más detalles que los precios. "Los vestidos que cuestan Bs 200 se alquilan en Bs 70 y los ternos de Bs 900 aquí lo consiguen en Bs 200, es una opción que es ideal para la gente que no tiene las posibilidad de comprar y lucir estas prendas", dice la mujer.

La juventud prefiere pagar una vez y no repetir. Le da la razón Hilary Ortega, una jovencita que afirmó haber ido a diversos mercados y comerciales populares de la ciudad, en busca de la prenda que lucirá el día de su graduación. Sin embargo, finalmente optó por alquilarlo. "No digo que están caros porque hay de todo precio, pero las telas no son de calidad y son diseños repetidos, en cambio acá lo realizan como uno quiere por el mismo costo, al fin es para una noche", dice la muchacha que rentó por Bs 300 un moderno y elegante vestido.

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