De las 130.000 personas con capacidades especiales que hay en el país, al menos 40.000 aún no tienen acceso a la educación, pese a los esfuerzos del Estado por ampliar la cobertura.
Según el viceministro de Educación Alternativa y Especial, Noel Aguirre, actualmente unas 30.000 personas con discapacidad asisten a los centros de educación especial o a las unidades educativas regulares inclusivas, pero aún queda mucho por hacer.
La autoridad nacional dio a conocer estos datos en Santa Cruz, durante el lanzamiento de la Semana por el derecho a la educación alternativa y especial en Bolivia, que contempla una serie de actividades que incluyen foros para analizar los avances en estas dos áreas y sus proyecciones.
De acuerdo con el viceministro Aguirre, actualmente hay otras 400.000 personas adultas, que asisten a los 700 centros de educación alternativa y a los centros de educación técnica para adultos.
Cambios
Los cambios en la educación también contemplan la educación alternativa, pues en los centros para adultos se está aplicando un nuevo currículo, que ha sido diseñado especialmente para este sistema.
Uno de los impedimentos para una mayor cobertura es la falta de talleres para acompañar la teoría con la práctica
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